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¿Qué es el Megalitismo?

Descomunales piedras levantadas en amplios campos adornan el paisaje de muchas regiones de Europa desde hace miles de años. Desde la costa atlántica de las islas Británicas hasta las islas del Mediterráneo, piedras ordenadas de una u otra forma que un día fueron puestas ahí, en mitad de la nada, eso sí en lugares bien visibles, por unas personas que buscaban perpetrar su monumento para la eternidad.

Estas construcciones de piedra de la Prehistoria europea las conocemos como Megalitismo.

megalitismo en Stonehenge

Formas de megalitos

El megalitismo tuvo diferentes representaciones a lo largo del tiempo. Los más representativos son los siguientes:

Menhir: una piedra vertical clavada en el suelo. Este tipo de megalito es muy representativo y característico en la Península Ibérica. Resulta muy llamativo en el paisaje rural.

Trilito: es la versión evolucionada del menhir. Compuesto por dos piedras verticales sobre las cuales descansa otra formando una especie de marco.

Cromlech: son monumentos megalíticos compuestos por menhires formando un círculo. El más conocido no es otro que el de Stonehenge

Dolmen: compuesto por varias piedras verticales y otras tantas horizontales formando una especie de galerías. Algunas incluso cuentan con corredores de entrada y cúpula. De hecho, el dolmen en su origen estaba “tapado” por un túmulo de tierra o piedras que lo cubrían totalmente. En España hay un gran Patrimonio Cultural de dolmenes. Uno de los más conocidos es el conjunto de Antequera.

De dónde  proviene el megalitismo?

el megalitismoEl origen de la tradición megalítica surgió en Europa hacia el V milenio a.C. y, al igual que el Neolítico, apareció de forma simultánea en diferentes partes de Europa, sin aparente conexión unas con otras.

¿Cómo puede ser eso? ¿Tenían el mismo significado? ¿Cómo eran capaces de levantar majestuosos monumentos de tantas toneladas?

Desde las islas Británicas, pasando por Francia hasta la Península Ibérica, estos monumentos fueron apareciendo a lo largo y ancho de Europa llegando a ser todo un símbolo de la Prehistoria del viejo continente.

Un fenómeno tan llamativo, como podrás imaginar, ha sido estudiado hasta la saciedad y sigue siendo hoy en día motivo de investigaciones. ¿Qué sabemos de ello entonces?

El megalitismo parece ser que fue un fenómeno ritual y funerario que se extendió durante mucho tiempo, modificándose ligeramente conforme se fue avanzando en el tiempo, adaptándose a la cultura de los diferentes pueblos, hasta casi la Edad del Bronce.

Los dólmenes estaban destinados a albergar enterramientos de las personas del grupo. En ocasiones de generaciones. Por eso que desde su inicio se pretendía la perpetuidad en el tiempo y el acceso a un espacio, en cierto modo protegido, al que poder acceder con el paso de tiempo para seguir depositando los restos humanos de las consiguientes generaciones.

Pero, tal y como apunta Colin Renfrew, los monumentos megalíticos son algo más que tumbas. Y vaya que si lo son. Si nos acercamos a un tipo de construcción de este tipo, todo en ello es para sorprenderse: grandes bloques de piedra de toneladas, en muchos casos proveniente de cientos de kilómetros para construir una estructura simbólica…

¿Se aburrían los prehistóricos?

construcción de los dolmenesSeguramente no. O al menos esa no fue la razón principal que empujó a la sociedad prehistórica de Europa a construir tales estructuras. El megalitismo nos enseña el nivel de organización social existente en los grupos humanos hace 7.000 años. Una tarea de tal calibre no podía dejarse a la casualidad.

¿Y por qué de forma simultánea aparece en gran parte de Europa? Para Colin Renfrew la respuesta está en que estas sociedades, pese a encontrarse lejos unas de otras, compartían los mismos problemas y las mismas dificultades: el crecimiento demográfico beneficiado por la Neolitización (y que vimos en este artículo) produjo un gran arraigo regional en la gente.

Una forma de señalizar los lugares a los que sus gentes pertenecieron y que otorgaría a la vez prestigio, tradición y fomentaría el sentimiento de pertenencia a un colectivo, a un grupo, a una sociedad.

Estas actividades, tuvieron que ser organizadas por unas élites y llevadas a cabo por unos grupos fuertemente cohesionados. Estos proyectos servirían también para fortalecer los vínculos sociales.

¿Qué podemos extraer entonces de estas construcciones? ¿Qué nos dicen de sus protagonsitas?

Además de esa organización que he comentado, un esfuerzo de tal calibre, se necesitaría una gran mano de obra. Y para eso, es necesario que las necesidades básicas estén cubiertas para que terminadas personas puedan dedicar sus esfuerzos a proyectos que no produzcan alimentos como la construcción de un monumento en memoria de los seres queridos del grupo.

Es por eso que la Neolitización fue un elemento fundamental en la aparición del megalitismo. Sin excedentes, hubiera sido imposible invertir esfuerzo humano en otros trabajos.

El megalitismo fue, además de monumentos en memoria de los seres querido, todo un movimiento de organización y evolucion social. Un tema este muy profundo y al que solo le hemos dado alguna pincelada.

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